Ignorancia inducida

Es tan fácil anular lo que otros dicen “atacando” a la Iglesia, porque son Apostatas o Antimormones, pero no nos detenemos a analizar las razones por las que ellos hablan así, porqué ellos sacan a la luz esa parte de nuestra historia que no nos dejan ver.

Nos enseñan a verlos como enemigos y nosotros muy conformes y gustosos desmeritamos sus palabras sin parar a ver el por qué quienes se toman la molestia de informar sobre nuestros errores, “se fueron o los fueron” o por que no aceptan nuestras enseñanzas, ellos tienen una vida propia, son gente instruida y muy inteligente que se preocupa por mirar un poco mas de lo que le enseñan, que se toman el trabajo de comprobar la veracidad de lo que le dicen y por eso “ven” las inconsistencias en nuestro sistema y enseñanzas, pero nosotros no nos damos cuenta de que nos inducen, nos enseñan a NO verlas.

Excomulgado y Apostata son sinónimos para nosotros porque así nos los pintan, yo pregunto ¿Qué tan apostatas son esos excomulgados? Ni nos paramos a investigar, los señalamos con el dedo, los ignoramos, nos burlamos de ellos y con esa actitud les ponemos un pie en el cuello para que se hunda mas en su negrura (según nuestra percepción), no nos damos cuenta de la manera ruin y despiadada en que actuamos al instalarnos en nuestro pedestal de perfección y dignidad, da verdadera lastima y verguenza leer los comentarios expuestos por “mormones dignos” en respuesta a cuestionamientos legítimos, no se preocupan por analizar la evidencia, no se molestan en considerar las preguntas y aportar las posibles respuestas – es que no las tienen – en cambio tiran su bomba de humo tradicional, burlas, ataques, acusaciones, citas copiadas, escrituras aprendidas, condenar al que cuestiona y restregarle en la cara la propia obediencia y dignidad ante el Señor. No se dan cuenta cuan fariseos y zoramitas son “porque con su voz Le llaman pero sus hechos están muy alejados de El.”