sábado, 30 de enero de 2010

Analisis que no hacemos II



He leído algunos blogs mormones que se ajustan muy bien al concepto de Apologética:

“Actualmente el término hace referencia al método de estudio empleado en algunos casos particulares, por grupos o individuos que promueven causas sistemáticamente, justificando ortodoxias, o negando a conveniencia algunos actos e incluso crímenes. La "lógica" apologética se basa en el "blanqueamiento" de las causas que apoya, principalmente a través de la omisión de los hechos negativos (percepción selectiva) y la exageración de los argumentos y hechos positivos; ambas técnicas comunes en la retórica clásica.”

Estos ilustres, al querer justificar los errores y la falta de pruebas físicas, acuden a pruebas documentales que son muy cuestionables, solo publican los comentarios que les son favorables, esos que aplauden y halagan sus publicaciones, que no son más que sus propias teorías y personales interpretaciones. Los que no les dejan muy bien parados, esos comentarios que presentan pruebas que echan por tierra sus “verdades absolutas” y les invitan al debate serio, no son publicados y su autor es desacreditado, comportamiento muy poco honesto y digno de un mormon ilustre como pretenden ser; contrario a los administradores de los blogs no mormones que he visitado y en donde se expone nuestra historia y nuestras doctrinas cuestionables, ellos publican TODOS los comentarios, sean favorables o no, ahí radica el verdadero debate, el deseo sincero de compartir conocimientos, de intercambiar opiniones.

Algo curioso que he visto, es que en cada foro o blog mormon que he visitado y dejado mis preguntas, aunque me he identificado como SUD, no me han creído, me han tachado de antimormona y enemiga de la Iglesia, francamente me da pena su cerrazón de mente, la estupidez de sus razonamientos, pues ¿Quién dijo que los que buscan respuestas no son mormones sinceros? ¿Quién dijo que se deja de ser mormon cuando se cuestionan las doctrinas erróneas y los baches en nuestra historia que son tan evidentes? ¡Cielos! Que manera tan estúpida de pensar de la gente que se supone es la más instruida y escogida sobre la faz de la tierra. Y pensar que hace poco yo era igual de cerrada ¡¡uf que vergüenza!!

Estos “sabios” apologistas mormones en su afán de exponer “humildemente” su supuesta erudición, no se dan cuenta de la ridiculez de sus palabras, al estar tan enamorados de sus inteligentes conclusiones y deslumbrados con su propio brillo, no son conscientes de que incluso se contradicen a si mismos, he visto y comparado notas que se anulan entre si; desmienten lo que otros colegas apologistas han dicho en defensa del Libro de Mormon, incluso ridiculizan y desmienten lo que los anteriores traductores y correctores del Libro de Mormon han dicho, hasta contradicen claramente las mismas Escrituras que citan.

Preguntas como las que siguen, simplemente las ignoran o acomodan la propia Escritura en cuestión para que esté acorde a su teoría personal, acá la veracidad y la honradez, no son importantes. Porque en el mormonismo debes proteger el “Mito” ¡¡cueste lo que cueste!! y la actitud hacia la verdad es “¡La fe antes que los hechos!”

- ¿Dónde están los huesos de los cientos de miles que murieron combatiendo en Cumorah? Mormon 6:11-15

Si aun hoy día se encuentran huesos de animales prehistóricos, con más razón van a encontrar en perfecto estado las osamentas de tantos soldados muertos en un mismo sitio, hablamos de al menos 220,000 (doscientas veinte mil) personas, ¿por que no presentar tan contundente prueba? La Iglesia es dueña de ese terreno ¿Por qué no hacen excavaciones e invitan a arqueólogos reconocidos en todo el mundo para que certifiquen los hallazgos que seguro harán?

- ¿Dónde están los huesos de los caballos que vivieron en America en la época de los Nefitas? 1 Nefi 18:25




Leí unas notas sobre hallazgos de fósiles de caballos precolombinos que datan de hasta 10,000 años, no mencionan para nada el detalle de que para la época en que los colonizadores españoles llegaron a nuestras tierras, esos “caballos” hacía mas de 3,000 años que habían desaparecido.

¿Dónde están las espadas con las que pelearon estos pueblos?

Dicen que en realidad solo unos pocos tenían espadas y que cuando alguien perdía su espada, esta era recuperada por su enemigo, habla de espadas hechas de obsidiana, pero esta es una roca volcánica fósil, la roca no se evapora, también habla de espadas hechas de madera, como las que hacíamos mis primos y yo para jugar. Pero va más allá y niega que en esa época se conociera o dominara el método de aleación de metales.

Desmiente claramente las escrituras pues Nefi dijo que fabrico muchas espadas, por lo que es de suponer que si hizo las espadas a semejanza de la espada de Laban (1Nefi 4:9), estas eran de acero (2 Nefi 5:14); en (2 Nefi 5:15), se menciona el acero y otros metales. Ammon, se hizo siervo del rey Lamoni, estaba cuidando los rebaños del rey cuando vinieron a atacarles, el les corto los brazos ¿Con que? con su espada (Alma 17:25) Ammon era un simple siervo, no era un guardián, ni un soldado y tenia espada, no hay que ser genio para deducir que cada hombre en edad de pelear llevaba una, obvio ya que según la narración, ellos vivían en constante amenaza de los Lamanitas, y debían estar preparados para defenderse. El pueblo de Anti-Nefi-Lehi dejo sus armas y las enterró (Alma 24:16-17). En (Eter 7:8-9) dice que Shule hizo espadas de acero para quienes le siguieron y peleo para restituirle el reino a su padre Kib. Y a lo largo de la narración del Libro de Mormon se mencionan muchas grandes guerras con mucha mortandad de lado y lado, se habla claramente que muchos murieron por la espada, es decir, que hubo espadas y de que estas debieron ser abundantes, no hay dudas.

- ¿Dónde están las monedas de que se habla en el Libro de Mormon? Alma 11:4-18



Según lo que leí, en esa época NO había monedas, que lo que dice el capitulo 11 del libro de Alma, es un ERROR, porque en el Libro de Mormon no hablan de monedas, sino de medidas. Entonces, un Senine, un Senum, un Seón, un Shim, un Limna, un Amnor, un Ezrom, un Ontí,, un Shiblón, un Shiblum, un Léah y un Antión, ¿eran medidas de PESO o de Longitud? no monedas, el muy brillante apologista contradijo, desmintió lo que dice (Alma 11:4) “Y éstos son los nombres las diferentes monedas de su oro y de su plata…”




Por ahora les dejo pensando en estas cosas, ya luego seguiré con mas analisis, porque la verdad que son tantos los detalles que pasamos por alto…

domingo, 24 de enero de 2010

Analisis que no hacemos I

A proposito del viaje Jaredita a la tierra prometida, y las planchas de oro de José Smith, continuare con esos análisis de nuestras Escrituras que no nos molestamos en hacer, o que si los hacemos y vamos por respuestas recibimos una amonestación a revisar nuestra fe, y dado que permitimos que nuestra inteligencia sea burlada y nuestra capacidad de pensar sea limitada, que nos quedamos tan campantes y felices y hasta aplaudimos y justificamos la manera como ridiculizan e irrespetan la inteligencia de Jesucristo, ya que supuestamente fue El quien le dicto la traducción del Libro de Mormon a José Smith.

Dejare algunos razonamientos lógicos para los cuales no se necesita el Espíritu, ni hay que preguntarle a Dios si es cierto o no, porque esta escrito y el error se nota a leguas, con el perdón del mormon adoctrinado, programado y fanatizado (como en un tiempo lo fui yo) que me lee, voy a dividir las preguntas por grupos, ya que si me extiendo mucho, serian tantas las contradicciones, que en vez de estimularle a analizar con su lógica natural, lo que podría provocar es el rechazo que su subconsciente activaría ante tales cuestionamientos, porque estamos programados para creer antes de saber, ignorar las inconsistencias, los errores y no cuestionar la autoridad divina del profeta inspirado.

1Nefi 1:2 y 4
Lehi había vivido toda su vida en Jerusalén, pero ¿hablaba egipcio aun cuando estas dos naciones siempre han estado en conflicto y aun hoy persisten? ¿Por qué les enseño Egipcio Reformado a sus descendientes en vez de enseñarles su idioma natal, el hebreo? Un judío bastante ortodoxo si abandonó sus costumbres y renegó de su idioma para adoptar el de un pueblo enemigo al suyo. Los judíos que conozco llevan sus costumbres, su idioma y su religión a cualquier lugar del mundo que vayan y son muy celosos en preservar sus raíces.

Y hablando de Egipcio Reformado ¿por que ningun erudito Egiptologo, jamas ha hablado de este idioma?

En 2 Nefi 5: 5-6 y 14 dice:
5 Y aconteció que el Señor me advirtió a mi, Nefi, que me apartara de ellos y huyese al desierto, con todos los que quisieran acompañarme. 6 Sucedió, pues, que yo, Nefi, tome a mi familia, y también a Zoram y su familia, y a Sam mi hermano mayor y su familia y a Jacob y José, mis hermanos menores, y también a mis hermanas y a todos los que quisieron ir conmigo. Y todos los que quisieron acompañarme eran aquellos que creían en las amonestaciones y revelaciones de Dios; y por este motivo escucharon mis palabras.
14 Y yo, Nefi, tome la espada de Laban y conforme a ella hice muchas espadas, no fuera que de algún modo, los del pueblo que ahora se llamaban Lamanitas cayeran sobre nosotros, y nos destruyeran; porque yo conocía su odio contra mi y mis hijos y aquellos que eran llamados mi pueblo.

Analicemos esto:
Lehi con su esposa, sus hijos e hijas, Ismael y su esposa, hijos e hijas, y sus respectivas familias y Zoram salieron de Jerusalén en el año 600 AC, los hijos de Lehi y Zoram, tomaron por esposas a las hijas de Ismael, caminaron por el desierto por ocho años, allí les nacieron hijos a las familias que se conformaron y Lehi tuvo dos hijos mas, se embarcaron y llegaron a la tierra prometida. Según mis cálculos ese grupo de gente que llego a la tierra prometida no pasaría de 30 ó 40 personas, niños incluidos.

Pasaron los años, Lehi falleció y dejo a Nefi como líder de sus hermanos, estos se rebelaron y Nefi optó por irse con quienes le quisieran seguir, a esa fecha han transcurrido unos 30 años y estas familias habían crecido tanto que se dividieron en dos pueblos: Nefitas y Lamanitas, Nefi decide hacer muchas espadas para defenderse en caso de que los Lamanitas cayeran sobre su pueblo.

Suponiendo que estas familias se hayan multiplicado de forma desmedida durante estos 30 años.
¿Cuántos habitantes podrían haber sido? ¿300, 400, 500, 600?

¿Qué edad tendrían los descendientes de Nefi y demas que llegaron a la tierra prometida?

Segun mis calculos, los que nacieron inmediatamente salieron de Jerusalén y estaban aptos para pelear tendrían entre 28 y 17 años de edad, los demás serian niños de 15 a 2 años. Estamos contando ambos pueblos y debemos tomar en cuenta que debieron nacer algunas niñitas tambien, para garantizar la expansion de estos pueblos en los años siguientes, por lo que si los dividimos en dos, estas dos grandes naciones, estarían conformadas por unas ¿250 ó 300 personas cada una? ¿cuantos de ellos estarian en condiciones de irse a una guerra? aun siendo algo exagerada en la forma de reproducirse, no me explico la descripcion de dos grandes pueblos enemigos y con amenazas de guerra.


2 Nefi 5:15
Nefi dice que prosperaron mucho como pueblo, se multiplicaron en el país gracias a su obediencia, construyeron edificios y trabajaron con toda clase de madera, con hierro, cobre, bronce y acero, también había oro y plata y minerales preciosos en gran abundancia.

¿Donde estan las ruinas de esas grandes y fortifiacadas ciudades? En todo el Libro de Mormon hablan de grandes ciudades y templos, pero no hay evidencia fisica que las sustente.


2 Nefi 5:16
Construyo un templo según el modelo del templo de Salomón, una obra sumamente hermosa, pero no utilizo tantos materiales preciosos porque no se hallaban en esa tierra.

¿De cual tierra esta hablando?, porque en el verso 15 dice que hay abundancia de minerales preciosos, incluso hace un inventario de los mismos, ¿y en el siguiente verso ya no tienen nada de esto?

Es como para quedarse pensando ¿verdad?

sábado, 16 de enero de 2010

Las Planchas de oro de Jose Smith

Siempre me senti intrigada con el relato de las planchas de oro, pero esas dudas se me quedaron en la repisa, como tantas otras, hasta que lei esta cita publicada en otro blog, de la cual tome algunos fragmentos.


Joseph Fielding Smith dijo:

“El mormonismo, tal como se le llama, debe permanecer o caer junto con la historia de José Smith. O él fue un profeta de Dios, llamado, apartado y comisionado divina y adecuadamente, o por el contrario fue uno de los fraudes más grandes que este mundo ha visto. No hay término medio.

Si José Smith fue un engañador, alguien que voluntariamente intentó desviar a la gente, entonces debería ser descubierto públicamente; sus reclamos deberían ser refutados y sus principios expuestos como falsos, pues la doctrina de un impostor no puede estar en total armonía con la verdad divina. Si sus reclamos y declaraciones estaban fundados sobre el fraude y el engaño, es lógico que debieran aparecer muchos errores y contradicciones, muy fáciles de detectar. La doctrina de los falsos maestros no soportará la prueba cuando sea comparada con las normas de medición aceptadas: las Escrituras.”— Joseph Fielding Smith, Doctrinas de Salvación, 1954, vol. 1, p. 181.

Aca algunas escalas de medidas:

1m = 100 centímetros
1m3 = 1000 decímetros cúbicos
1m3 = 1, 000,000 centímetros cúbicos
1 pulgada = 2.54 centímetros
1 pie = 30.48 centímetros [12 pulgadas]
1m3 = 35.28 pies cúbicos [(3.28)(3.28)(3.28)]
1 m cúbico de oro = 19.3 toneladas
1 pie cúbico de oro = 547 kilos [19,300 entre 35.28 pies cúbicos

Las planchas de oro de José Smith.

Las dimensiones de las planchas:

8 pulgadas de largo [.66 de pie lineal]
7 pulgadas de ancho [.58 de pie lineal]
6 pulgadas de espesor [.5 de pie lineal]
(.66 largo de pie) (.58 de ancho de pie) (.50 de espesor de pie) (3.28 pie cúbico)

Volumen de las planchas de José Smith = .6277 de pie cúbico
.6277 por 547 kilos = 343.35 kilos

Las planchas de oro de la Historia de José Smith pesaban el equivalente a 343 kilos aproximadamente, (unas 756 libras).

Entonces ¿Cómo José Smith las colocaba en una bolsa de tela y caminaba con ellas varias millas de distancia?

¿Cómo Emma Smith las movía de vez en cuando para asegurarse de que no fueran encontradas por los anti-mormones?

¿Cómo los Tres Testigos las tocaron y "sopesaron"?

¿Era José Smith el Superman del siglo XIX para mover ese peso tan fácilmente o fue un simple mentiroso que no tenía una idea mínima de lo que afirmaba?

Para que Usted se de una idea – un bulto de cemento de CEMEX o de cualquier otra cementera pesa 50 kilos, (unas 110 libras). ¿Alguna vez ha intentado cargar uno? Bien, Usted tendría que cargar casi 7 bultos para hacerse una idea del peso de las citadas planchas que ¿Nefi? ¿Moroni? Le entrego.

Algo huele mal en esa historia ¿Usted que piensa? ¿Alguna explicación razonable? ¿Quizás José Smith, Moroni y Dios estaban confundidos y las planchas eran realmente de bronce en cuyo caso hubiesen pesado menos de 150 kilos? (330 libras). Fin de la cita.

Las palabras de Joseph Fielding Smith son una afirmación contundente, la cual los mormones debemos tomar en serio, el decía: "es lógico que aparezcan muchos errores y contradicciones muy faciles de detectar"

La cita que acabo de copiar señala un error demasiado evidente como para restarle importancia, estamos hablando de unas planchas de oro que según las medidas descritas por José Smith, debian pesar el equivalente a cargar siete veces mi peso (yo peso 110 libras), entonces es valido preguntarse:

¿Como es posible que José y Emma Smith pudieran levantar tal peso con tanta facilidad? ¿moverlo de un lugar a otro como si fueran plumas?

¿Acaso nadie se ha molestado en analizar estos errores de calculo?

¿Que acaso nadie ha tomado en cuenta las palabras de Joseph Fielding Smith y las ha puesto en su contexto?

Pero salio un apologista que como el Chapulin Colorado vino a defender estas cuestionadas planchas; segun el, estas NO eran de oro, sino una aleacion de cobre y bronce "bañadas" en oro, cuyo peso seria de unos 25 kilos (55 libras). ¡¡Eureka!! ¡¡Misterio resuelto!!

Pero... Cualquier mormon a quien usted le pregunte ¿De que estaban hechas las planchas de donde se tradujo el Libro de Mormon? le respondera que eran de ORO.

En la introduccion del Libro de Mormon en el segundo parrafo dice: "... Sus palabras escritas sobre planchas de oro..." En el testimonio de Jose Smith: "Dijo que se hallaba depositado un libro, escrito sobre planchas de oro..." En la Guia para el Estudio de las Escrituras, pagina 166 se definen las planchas de oro y hacen referencia a la introduccion del Libro de Mormon y al testimonio de Jose Smith.

Desde su "restauracion" la Iglesia ha mantenido la version de que las planchas de donde fue traducido el Libro de Mormon eran de ORO, llevamos 179 años repitiendo el mismo coro: "El Libro de Mormon, salio de unas Planchas de ORO" no de unas planchas de hojalata que parecian oro.

Con esas afirmaciones, este apologista le dice MENTIROSO a Jose Smith quien afirmo en su testimonio que esas planchas eran de oro, le dice MENTIROSO al angel Moroni que le entrego dichas planchas, le dice MENTIROSOS a quienes han corregido los textos en Ingles, a quienes los han traducido a otros idiomas, tambien les dice MENTIROSOS a las autoridades generales encargadas de supervisar la correccion y veracidad de estos textos. En su afan por "aligerar" el peso de las planchas, no se dio cuenta de que esta desacreditando el mismo libro que defiende.

Los errores y contradicciones existen, saltan a la vista, pero estamos tan programados, fanatizados y adoctrinados que nos hacemos de la vista gorda ante la evidencia y vivimos sin preocupaciones porque "todo esta bien en Sion, si... Sion prospera, todo esta bien."

martes, 5 de enero de 2010

Los Mormones Creemos en ser honrados...

Creemos en ser honrados, verídicos, castos, benevolentes y en hacer el bien a todos los hombres; en verdad podemos decir que seguimos la admonición de Pablo: Todo lo creemos, todo lo esperamos; hemos sufrido muchas cosas y esperamos poder sufrir todas las cosas. Si hay algo virtuoso, o bello, o de buena reputación, o digno de alabanza, a esto aspiramos. Articulo de Fe No.13

[Yo eso lo aprendi ( ser honrada, verídica e íntegra) antes de llegar a la IJSUD. Pero ¿Eso lo creen todos los miembros de la Primera Presidencia? ¿Nuestros profetas todos han sido ejemplo vivo de eso que predican?

Si eres de esos a quienes les da flojera pensar, si eres parte de la masa no pensante que se conforma con el cuento que le dijeron es real, este es el momento de irte, sigue tu camino viviendo en tu burbuja de mentiras.

En cambio, si te interesa seguir enterandote sobre mas informacion desconocida, te aconsejo ponerte comodo, relajate un poco, descansa tu mente unos minutos, pues lo que vas a leer a continuacion te dejara pensando mucho. Si estas buscando enterarte de hasta donde pueden llegar los "honrados" miembros de la Primera Presidencia a fin de preservar todo lo que sustenta el cuento mormon, disfruta con la lectura!
LAL]


Hablando de HONRADEZ Y VERACIDAD...

Mark nació y creció como mormón - niñez en la Organizacion Primaria, Hombres Jovenes, Sacerdocio Aarónico, Seminario e Instituto, clases de Escuela Dominical, etc. - y como todo fiel varón, tan pronto recibió el Sacerdocio de Melquisedec y se ordeno como élder, el Élder Mark Hofmann cumplió sus dos años de servisio misional en el sudoeste de Inglaterra, regresando en 1976.

Luego, habiéndose casado en 1979, se dedico a formar una familia con su agradable esposa; exteriormente Mark parecía ser un buen hombre joven mormón. Sin embargo, Mark tenía un lado tétrico y encontró un blanco fácil en la iglesia mormona y su mitología.


Desde sus inicios, los fundamentos primitivos de la historia de la iglesia mormona han estado envueltos con afirmaciones de fraude, engaño, magia folclórica y misticismo. Además, desde inicios del siglo XX, la iglesia mormona actual establecida en Salt Lake City ha estado tratando de distanciarse de aquellos hechos, declaraciones, afirmaciones, registros y al mismo tiempo buscan proveer una explicación “divinamente legítima” para su establecimiento.


Mark Hofmann entro al fértil campo mormón de acres y acres de necesidad urgente por proteger la historia oficial de la iglesia a cualquier costo; y Mark tenía un plan para ganar dinero y hacer que la iglesia mormona se viera estúpida, y en ambas cosas tuvo éxito!


La transcripción de Anthon

La primera gran anotación de Mark Hofmann fue la “Transcripción de Anthon”.

Martin Harris, el hombre que financió la primera impresión del Libro de Mormón en 1830, se sentía muy escéptico de invertir dinero sin alguna prueba de la “Biblia dorada de José Smith”. “El profeta” únicamente le hablaba de la maravilla que el ángel le habia revelado y solo le permitía sostener una caja de madera que supuestamente contenía las “Planchas de Oro” de las cuales el Libro de Mormón debía ser traducido, pero esto no fue suficiente para satisfacer al rico granjero; quería tener la certeza de la inversión que haría, aunque fuera para Dios, por lo tanto, lógicamente, él quería más.


Entonces, José Smith, copió los supuestos caracteres de las planchas de oro y Harris los llevó a la ciudad de Nueva York para que los eruditos de ese tiempo validaran los caracteres.

Ese documento, además de los “caracteres” del idioma que José Smith copiaba; contenía una descripción física de las planchas, donde el “profeta” anoto las características de las mismas [8 pulgadas de largo por 7 de ancho y 6 de espesor en el área de sus laminas grabadas mismas caracteristicas que fueron registradas en otros volúmenes de la Historia de la Iglesia por el mismo Smith]; el referido documento, es conocido en la historia como la “transcripcion Anthon”.

Antes de verle partir, Smith le explicó a Harris que los caracteres no eran de ningún idioma conocido, sino que eran de uno al que él denomino “egipcio reformado”.

Finalmente, ya en la Ciudad de NY, Harris encontró a Charles Anthon, un Profesor de griego y latín – en la Universidad de Columbia. Nadie sabe con seguridad lo que sucedió en esa reunión, excepto que Harris regresó afirmando que el Profesor Anthon había identificado los caracteres como egipcios, caldeos, asirios y árabes. [Al menos, esa fue la versión de José Smith y por supuesto, la que se da por oficial hasta hoy día, aunque nadie a podido explicar como es posible que una familia de judíos y sus descendientes usara caracteres en sus registros sagrados de sus supuestos tratos con Dios, de civilizaciones a las que histórica y espiritualmente aborrecen]

Posteriormente, cuando el Profesor Anthon escuchó que los mormones estaban diciendo que él había legitimado los caracteres, escribió una negación despiadada que coloco desde el inicio a José Smith y su “registro sagrado”, bajo la etiqueta del engaño.

La “Transcripción de Anthon,” que Martin Harris había llevado en su viaje, y que supuestamente el profesor de la universidad de Columbia había revisado aquel año, se creía extraviada.

Hasta un día del mes de mayo del año 1980, en que de nuevo “apareció” de la nada, gracias a la “bendición del Señor” y a la talentosa mano de Hofmann.

Los Hermanos de Salt Lake City estaban menos que extasiados cuando recibieron la portentosa buena nueva. Se cuenta que cuando Gordon B. Hinckley entro a la oficina de Spencer W. Kimball con el documento cuidadosamente envuelto en un plástico especial, estaba prácticamente llorando de felicidad. Nathan E. Tanner primer consejero de la presidencia estaba boquiabierto y el Élder Boyd K. Packer sonreía imaginando el revuelo que ocasionaría en Utah primeramente y luego en el mundo entero la aparición de la legendaria transcripción.

Este “hallazgo increíble” abrió de par en par el interior de la oficina principal de la iglesia mormona para Hofmann. El presidente Kimball le abrazo al tiempo que le agradecía por su apoyo y desinterés. Luego, para Hofmann, todo sería hilar y coser durante algunos años dorados.

El Presidente Kimball pidió que se convocara a los miembros del Quórum de los Doce lo más rápidamente posible a fin de hablar de la bendición derramada sobre los hijos del reino.

Mark engañó por completo a todos los líderes superiores de la iglesia mormona y se llevó entre $20.000 y $30,000 dólares fácilmente por su esfuerzo engañoso; una suma bastante atractiva en 1980.


Hoffman no tan sólo se burló de los líderes, sino que puso a sus pies el poder absoluto de la “nomenklatura” de la iglesia mormona y con ello, se aseguro un festín de privilegios y recursos.


[Fiuu! nada despreciable la suma para esa epoca y aun hoy es un monton de dinero que la Primera Presidencia no se toco el pecho para usar el dinero consagrado al Señor para patrocinar a un estafador. LAL]


La Carta de Salamandra


Hofmann se sintió gratamente reconfortado y lleno de satisfacción, observo el paso de los días siendo el delfín de los “hermanos” de la manzana del Templo. Todos los que estaban al tanto de la aparición de ese documento que situaría finalmente a la iglesia frente al mundo en su real papel de la Iglesia verdadera – ya no habría dudas ni preguntas sin respuestas. José Smith, el martirizado profeta sería entronizado finalmente – trataban a Mark como un verdadero ejemplo de fe y revelación viviente.


Mark ideo varios documentos de la más diversa índole, entregando a los Hermanos de Utah en febrero de 1981 – una copia de puño y letra del mismo Profeta Smith – de la “Bendición patriarcal de Joseph Smith III”, que el entonces aun niño recibió de su padre y donde el mismo fundador del mormonismo dejaba por escrito y firmada la bendición misma que señalaba la re-inauguración del orden patriarcal para encabezar el liderazgo de la Iglesia a través de su sangre, tal como en la época de Abraham y su descendencia. En esa bendición Joseph Smith señalaba que su hijo sería el siguiente profeta por designio y revelación del Señor.


Este documento siempre fue objeto de temor por Brigham Young y John Taylor quienes presenciaron la referida bendición de manos del mismo “Profeta” Smith y que sabían que aquella designación puesta en papel, no solo los desnudaba como impostores y mentirosos, sino que podía causar una deserción en masa de la gente que les seguía.


De hecho, fue esa certeza, de presenciar ellos mismos que la bendición fue otorgada; lo que realmente hizo que Brigham Young buscara alejar a la gente de la zona de Illinois y Missouri, y llevarles al entonces desierto de México, con lo cual Young, los sobrevivientes del Quórum de los Doce y sus seguidores terminaron saliendo de las fronteras de los Estados Unidos de América y fundando un estado independiente al que llamaron Deseret y que finalizo siendo llamado Utah al convertirse en parte de la expansión estadounidense en el siglo diecinueve.


Mark Hofmann recibió entre diez mil y veinte mil dólares por el descubrimiento del incomodo documento en el cual el liderazgo de Salt Lake City esperaba obtener una pista de cómo invalidar las pretensiones de la Iglesia Reorganizada que hasta hoy día dirigen los descendientes de Joseph Smith en Missouri.


Cabe hacer mención que el documento original siempre se ha asegurado, estar en poder de la Iglesia Reorganizada ya que Emma Smith se llevo con ella las posesiones personales, los diarios y registros originales del “mártir” mormón; y son esos documentos el tesoro histórico sobre el cual descansa la autoridad legal de la Iglesia Reorganizada, entre ellos, por supuesto, la bendición dada por el mismo Joseph Smith.


Entre los documentos que oficialmente y a través de otros, Mark Hofmann entrego a los líderes de la Iglesia se encontraban:

• Marzo de 1981.- “Valley Notes” certificados usados como dinero entre los mormones en los primeros días de Nauvoo, Illinois. Hofmann recibió más de $20,000 dólares por estos documentos.

• Marzo de 1982.- “El Testimonio de Martin Harris”, este falso “hallazgo” fue mezclado con otros documentos históricos reales. ¿Costo? $25,000 dólares.

• Julio de 1982.- “Carta Lucy Mack”, otro falso “hallazgo” que igualmente fue mezclado con otros documentos históricos reales. ¿Costo? Más de $30,000 dólares.

• Septiembre de 1982.- “Maid of Iowa” Boletos para transporte en bote por el rio. Hofmann recibió $7,500 dólares.

• Enero de 1983.- "Stowell Money-Digging Letter to Joseph Smith". Este documento fue llevado a la Iglesia por Hofmann y rápidamente capto la atención de los “Hermanos” ya que era la evidencia documental de que José Smith en efecto realizaba labores de buscador de tesoros como los relatos de la época del “Profeta” testimoniaban.

Cuando Gordon B. Hinckley entrego a Hofmann $45,000 dólares en efectivo, tan pronto tuvo en sus manos el “hallazgo documental” le dijo a Hofmann: “Esta carta nunca vera la luz del día”.

Entonces, en enero de 1984, llego la “Carta de Salamandra.”

Toda la “traducción” del Libro de Mormón ha estado desde sus inicios impregnada de misticismo y fraude. Sabiendo esto, Mark Hofmann ideó una carta que hacía juego perfectamente con aquellas afirmaciones y utilizo la inseguridad y el miedo de los líderes para sondear las oportunidades.

La carta “...sonaba más como un cuento de hadas de los hermanos Grimm que una clase de escuela dominical; jarrones con monedas o dinero protegidos por espíritus, piedras de videntes, hechizos encantados, “gafas” mágicas, fantasmas amistosos. ¡Y en lugar de un ángel benévolo, un “espíritu viejo” irritable y tramposo, que se transforma en una salamandra blanca!” — The Mormon Murders, p. 127

Para no involucrar directamente a la iglesia mormona en la adquisición de este documento altamente comprometedor (demasiada publicidad negativa), Hoffman logró hacer un trato con un “miembro fiel,” un hombre rico de negocios llamado Steve Christensen, para comprar el documento y así evitar que cayera en “manos equivocadas”.

La idea era permitir que el tiempo enfriara el interés en el documento para que luego Steve pudiera donarlo a la Iglesia, y así asegurarse un lugar prominente para él y su familia en el Reino Celestial en la vida futura. Hofmann se embolso según las investigaciones posteriores una cantidad cercana a los $50,000 dólares en aquel año de 1984.

Luego llegaron dos “descubrimientos” más (o “hallazgos” como gustaban definirlos el Élder Boyd K. Paker y el entonces consejero Gordon B. Hinckley) de documentos relacionados con eventos de los orígenes del mormonismo, en este orden:

• Octubre 9 de 1984 – "La carta Betsy Ross" por $12,000 dólares y una camioneta todo terreno que salio de una agencia de automotores propiedad de la familia del entonces apóstol Thomas S. Monson.

• Noviembre 10 de 1984 – "Jim Bridger signatures" por un poco más de $10,000 dólares además de gastos de viáticos por $8,000 dólares.

A fines de 1984, con su salud bastante desmejorada, Bruce R. McConkie se entero, vía la indiscreción de otro de los miembros del Quórum de los Doce – Thomas S. Monson – en una reunión del Consejo, que además del “Manuscrito de Anthon”, la iglesia había estado adquiriendo en los últimos cuatro años, diversos documentos históricos que confirmaban o exhibían la historia de la Iglesia.

Cuando pregunto sobre el particular, se encontró con una indispuesta respuesta por parte de quienes habían estado maniobrando en las adquisiciones – Gordon B. Hinckley, Boyd K. Paker, Ezra T. Benson y el Élder Hugh Pinnock [de la Presidencia del Quórum de los Setentas].

El Élder McConkie entonces advirtió al Consejo de los Doce en pleno que aquellas actividades dejaban mucho que desear y les recordó “El Señor no trabaja en las sombras”, cuando Boyd K. Packer y Gordon B. Hinckely trataron de minimizar el asunto alegando que el Presidente Kimball había dado la instrucción de mantener un bajo perfil en el asunto.

En respuesta, McConkie azoto con el puño la mesa de reuniones y con su autoritaria voz dijo: “Esto puede destruir los esfuerzos de nuestros misioneros y la fe de nuestros hermanos. Si se llegase a enterar la iglesia ¿Quién dará las explicaciones?”

[Pero ellos se asegurarian de que la iglesia (la masa no pensante) no se diera por enterada en caso de que a ellos llegara esta informacion, pues el lavado de cerebro que se lleva a cabo tan eficazmente, les induce a rechazar cualquier informacion que eche por tierra su percepcion de perfeccion y virtud y vaya que da resultado. Pero continuemos leyendo. LAL]

La Colección McLellin - 11 junio de 1985


“William E. McLellin era un Apóstol primitivo y asociado cercano de José Smith, quien en 1836 se apartó de la iglesia y se volvió uno de sus críticos más amargados. Hubo rumores por mucho tiempo que McLellin, quien guardaba las actas en las reuniones primitivas de los Doce, se había llevado consigo un baúl repleto de papeles, cartas y diarios, todos incriminatorios, con los cuales destruiría a la iglesia. Pero ni la colección misma, ni alguna parte de ella, había aparecido alguna vez. Hasta ahora.” — The Mormon Murders, p. 164


Hasta este año de 1985, Hofmann había tenido prácticamente una línea de crédito abierta con la presidencia de la Iglesia que le entregaba cantidades frecuentes, de manos de Hinckley casi siempre. Esta nueva estafa fue tan mal planeada y pensada, que Mark Hofmann ni siquiera falsificó o diseño los documentos antes de hablar con sus contactos en la iglesia. Él estableció un precio de $185.000 dólares y estuvo involucrando directamente a otras personas además de la iglesia mormona. Para ese entonces Hofmann había contactado a los líderes de la Iglesia Reorganizada para ofrecerles documentos que fortalecerían su posición y por supuesto, le dejarían más dinero.


Para entonces, Hofmann estaba disfrutando de la gran vida. Volaba de ida y vuelta a la Costa Este, casi siempre a Nueva York y a otros lugares relacionados con los orígenes de la Iglesia, “buscando” supuestamente documentos antiguos, “tesoros mormones” y gastando dinero como si su fuente fuera interminable [de hecho lo era hasta ese entonces].


Al mismo tiempo, por esos días, Hofmann buscaba comprar una casa por una suma bastante elevada en una de las zonas más caras de Salt Lake City y de manera ilógica para si posición y “especial trabajo”, empezó a gustar de las atenciones y las luces de la fama.


Se dirigió a las Oficinas centrales de la iglesia mormona y les dijo que necesitaba los $185.000 dólares para adquirir la Colección McLellin. Hugh Pinnock, hizo una llamada telefónica al Primer Banco Interestatal e hizo rápidamente los arreglos para la entrega; Mark sólo tenía que ir a recoger el cheque.


Hoffman también había tomado prestado dinero de varios otros mormones con la promesa de proveer la Colección McLellin.


Buscando manipular varios lados para su propio beneficio, Hofmann noto que el tiempo se le estaba acabando. Mark se encontraba bajo mucha presión para cumplir con sus obligaciones a la brevedad.


Steve Christensen (el comprador de la Carta de Salamandra) nuevamente apareció en escena cuando Mark estaba tratando la entrega de los $185.000 dólares arreglados con la Iglesia.


“Los Hermanos de Utah” habían obtenido la ayuda de Steve para completar la transacción McLellin por medio de un acaudalado Presidente de Misión en Nueva Escocia, Canadá.


En su confundida cabeza, Hofmann pensó que podía bajar la temperatura a la olla de presión que el mismo había encendido, quitando de en medio a Steve y luego haciendo lo mismo con uno de sus socios de negocios; de este modo, ganaría tiempo y distraería a los “Hermanos” (La Primera Presidencia) de la entrega de la “Colección McLellin” y se permitiría desviar la atención.


[El sabor del dinero mal habido parece tener una dulzura que es dificil de saciar, como dicen por ahi, el amor al dinero es la raiz de todos los males. LAL]

Las tres bombas


El día martes 15 de octubre de 1985, - en esa época Ezra T. Benson ya se preparaba para tomar posesión de su nuevo sitio en la Presidencia de la Iglesia, pues era bien sabido que Spencer W. Kimball estaba practicamente agonizando en esos días. Poco faltaba entonces para que Benson tomara su lugar como el nuevo "Profeta, Vidente y Revelador" mormón – los miembros de la Iglesia, la ciudadanía de Utah y la nación entera empezaron a enterarse de manera indirecta de la existencia de Mark Hofmann, los “hallazgos” y su relación con los “Hermanos”.


Dos bombas cegaron la vida de un hombre y una mujer. El hombre era Steve Christensen el contacto y operador de la Presidencia y colaborador directo con Gordon B. Hinckley. La mujer muerta era Kathy esposa de Gary Sheets quien por mala suerte, recibió el paquete que contenía el explosivo y que estaba destinado a su marido.


Ambas bombas de fueron fabricadas rústicamente con tubo; la que fue preparada para el millonario mormón Steve Christensen, fue especialmente brutal, habiendo sido rellenada con clavos de acero con la clara intención de extinguir por completo a su víctima.


Gary Sheets era el objetivo de la bomba número dos; sin embargo, su esposa, Kathy, encontró la bomba afuera de su casa y se convirtió en la desafortunada víctima de su poder mortal.

[La maldad revertida contra el malvado. LAL]

Mark Hofmann se encontraba en el centro de Salt Lake City, en el proceso de llevar a su destinatario la tercera bomba, cuando ésta estalló prematuramente y él se convirtió en su propia víctima.


Habiendo quedado seriamente herido, pero no muerto, se pensaba al inicio que Mark era una víctima inocente; sin embargo, la investigación claramente reveló que él era el que detonó los explosivos.


Nadie sabe con certeza quién era la victima intencionada de la bomba número tres que estallo ese mismo día, pero las teorías apuntaban a dos personas, Hinckley en primer lugar y Boyd K. Packer en segundo, aunque una especulación más sugería a Hugh Pinnock, el encargado de la caja chica de la Presidencia de la Iglesia y quien proveía a Hinckley del dinero que éste personalmente entregaba en las manos de Hofmann.


Mintiendo por el Señor


Hugh Pinnock, como se mencionó previamente, hizo los arreglos para obtener los $185.000 dólares en el Primer Banco Interestatal para que Mark Hofmann inicialmente comprara la Colección McLellin. El día después de la tercera explosión que hirió a Mark Hofmann, el Élder Pinnock fue interrogado acerca de los crímenes:

…el detective de la policía Don Bell lo interrogó a la 1:12 de la tarde del 17 de Octubre.

“Elder Pinnock, este es el asunto”.- comenzó Don Bell, con su libreta en la mano.

“Esta es una investigación de homicidio. ¿Conoce usted al Sr. Hofmann?”

Pinnock hizo una pausa y reflexionó por un momento: “No, no creo que lo conozca.” – The Mormon Murders pp. 246-247


Una mentira completa a todas luces, hecha por una Autoridad General de la Iglesia, el mismo hombre que siguiendo ordenes de sus líderes [Primero de Kimball y luego de Benson] entrego “dinero sagrado” para comprar documentos “históricos” falsos con el propósito de sostener o proteger el mito mormón.

Cuando KSL-TV reportó a nivel nacional que la iglesia mormona estaba envuelta en la realización de tratos con “hallazgos documentales” y pagos ilegales, una nueva bomba estallo, esta vez en la cabeza de los “Hermanos” líderes de la iglesia mormona quienes enfurecieron.

“La Iglesia está enojada porque dijimos que ellos ayudaron a concertar un pago. Bien, ¡pues lo hicieron! Ellos dicen que fue un individuo y no la iglesia, pero eso es absurdo. Puede que haya sido un individuo el que hizo la llamada, pero fue un oficial de la Iglesia, sentado en su oficina de la Iglesia, en sus horas de trabajo en la Iglesia, utilizando un teléfono de la Iglesia y lo hizo para el beneficio de la Iglesia. Nadie más quería la Colección McLellin excepto la Iglesia. Y el presidente de misión de Nueva Escocia no colecciona “hallazgos” documentales.

Él era simplemente un tipo con mucho dinero que dijo ‘Si necesitan ayuda, yo los ayudaré’. Si la iglesia dice que ellos no estaban ayudando a hacer ningún arreglo para comprar nada, ¿cómo se puede explicar el hecho de que la Iglesia se ofreció a conseguir un auto blindado para ir hasta Texas a recoger la Colección?” — The Mormon Murders, pág. 389

Cuando el recientemente fallecido “Profeta”, Gordon B. Hinckley, fue interrogado por los Fiscales del Condado, Bob Stott y David Biggs acerca de sus tratos múltiples con Mark Hofmann, él claramente mintió.

“Los fiscales Stott y Biggs se movían ansiosamente en sus sillas. Mike George, el investigador de la oficina del abogado del Condado quien había acompañado a Ken Farnsworth en la última entrevista con Hinckley casi cuatro meses antes, se maravillaba de cómo, con tiempo suficiente para recordar, Hinckley aún seguía sin poder recordar nada del asunto ni de Hofmann.

“¿Conoce a Hofmann? Pregunto Stott.

No lo recuerdo, estoy seguro que no.- Respondió Hinckley.

¿Alguna vez estuvo él en su oficina?” Preguntó Stott nuevamemte.

“Probablemente si, probablemente no”.- respondió Hinckley.

“¡Probablemente!” pensó Biggs.

- Ahora, incluso estaba olvidando lo que había admitido en la conferencia de prensa.” — The Mormon Murders, pp. 355-356

Hoy día, cuando se comparan las notas de los investigadores de este crimen, no queda duda que Gordon B. Hinckley, el “Profeta de Dios” para los mormones, estaba mintiendo a los fiscales.

Días después, desde dentro de las Oficinas Generales de la Iglesia en Salt Lake City alguien filtro a la prensa algunas fotografías tomadas en la entrega de algunos de los documentos, quienes aparecen en las imágenes, son un fiel testimonio de las mentiras y falta de integridad con las que la iglesia mormona y sus líderes se desenvuelven desde los días de Joseph Smith.

Kimball, Tanner, Hinckley, Monson, Benson, Packer, Pinnock, Paul H. Dunn, Oaks, Holland y muchos otros de los abogados y asesores legales que entonces participaron en la conspiración, son o fueron Autoridades Generales de la iglesia mormona; hoy día, algunos son apóstoles o profetas mormones, y son, sin duda, testimonio de la corrupción sacerdotal de lo que el Señor llamo en sus días, hipócritas tumbas blanqueadas.

En Utah - Uno no avergüenza a la iglesia mormona!

El caso con el cúmulo de pruebas en contra de Mark Hofmann era abrumador. Sin duda, él hubiera sido declarado culpable de Homicidio en 1er Grado y condenado a pena de muerte por estos crímenes despreciables; sin embargo, únicamente recibió una palmada en la mano por asesinar a dos personas inocentes, haciéndolos explotar con bombas de tubo y no tan sólo estafó a la iglesia mormona quitándoles cientos de miles, si no es que fueron millones de dólares, sino que estafó a otras personas también.

“Para todos fue claro que Bob Stott (el fiscal) estaba determinado a evitar un juicio, cueste lo que cueste,” dijo un policía cuando las noticias del arreglo se difundieron a través del departamento como el olor de una fuga de gas.

“Incluso si tuviéramos una confesión, Stott le hubiera dado a Yengich, el abogado de Hofmann cualquier cosa que hubiese querido y hubiese logrado el arreglo que deseara”.

Más adelante, cuando un reportero de “Los Angeles Times” voló a Salt Lake City para cubrir la historia de última hora del arreglo entre la fiscalía y la defensa, le dijo a Dawn Tracy [Reportero del Salt Lake Tribune] que el aspecto más sorprendente de todo el caso era la actitud de la parte acusadora, del fiscal mismo.

“El típico fiscal” – dijo el reportero – “sale y captura a los chicos malos. Sale y revuelve las cosas. Aquí, ellos son tan gentiles y cooperativos. Qué bonito arreglo entre la fiscalía y la defensa. En cualquier otro estado, hubiéramos visto este asunto ir a un juicio, porque así es como los fiscales ganan su reputación. Yendo a juicio, atrapando a los chicos malos, grandes salpicaduras, mucho tiempo de exposición mediática. Aquí, ustedes tienen un acuerdo amistoso entre la fiscalía y la defensa. ¿Cómo es que lo hacen posible? ¿Cómo rayos progresa un fiscal aquí?

“‘Hey,’ – contesto Tracy – ‘En Utah no progresas si avergüenzas a la iglesia mormona o si la haces quedar mal.

¿A quién le importa la verdad? ¿A quién le importa la justicia? En el mormonismo debes proteger el “mito”, ¡Cueste lo que cueste!”.The Mormon Murders pp. 420-421

El Fiscal mormón, Bob Stott, no cumplió con las responsabilidades de su oficio, porque en el mormonismo la actitud hacia la verdad no importa, es “¡La fe antes que los hechos!”. Además, esta la visita que el Presidente de Estaca y el Obispo hicieron a Stott la misma noche de aquel largo día en que el fiscal interrogó a Hinkcley por primera vez. ¿Que hablaron esa noche los dos líderes mormones y Stott? Aun es un misterio.

¿Por qué un hombre trastornado que hace estallar bombas, con 26 delitos graves en su contra y con la sangre de dos personas inocentes sobre sus manos, no iría a juicio? Realmente es muy sencillo. El llevar a Mark Hofmann a juicio hubiera significado llamar a los Profetas y Apóstoles mormones al estrado para testificar. Estas Autoridades Generales de los mormones habían sido totalmente estafadas por él al comprar de él documentos falsificados de la antigua historia mormona, que costaron cientos de miles de dólares.

Mark Hofmann pudo conservar cada centavo que dolosamente gano y aun mejor, recibio un pago para cubrir sus gastos de abogado de una fuente desconocida una vez que acordo cerrar el pico y permanecer en la carcel con la promesa de no ser ejecutado, siempre que, claro esta, no buscara ir a juicio y con ello, poner a los "profetas, ápostoles, Autoridades Generales y más mormones de altos vuelos" en el estrado de un juzgado y tener que testificar públicamente.

Seis meses después de que el asunto se "arreglo", Stott recibió un paquete amplio de beneficios médicos para él y su familia como una prestación de parte del Estado de Utah, también recibió un bono extra por su correcto desempeño en sus funciones y un jugoso aumento de sueldo; finalmente, doce años después él y su orgullosa esposa recibieron un llamamiento como Presidentes de Misión, la asignación llego firmada por el “Profeta vidente y revelador” mormón, ¿el nombre del “profeta”? Gordon B. Hinckley.

El mismo hombre que entrego en la mano de Hofmann, fajos de dinero y cheques a lo largo de casi 5 años. — The Mormon Murders pág. 439


[Y no puedo dejar de preguntarme ¿En verdad Dios guia a estos hombres? ¿De verdad Dios esta de acuerdo con el engaño, con el derramamiento de sangre, con la complicidad y la impunidad? es cierto que esta nota es larga, pero seguro que te ha dejado pensando. LAL]